MUCHA FIESTA

Mucha fiesta vivimos este fin de semana en Lugo. La ocasión lo merecía porque mi hermano aprobó la oposición que le permite tener ya su plaza de trabajo fija de por vida. Primero mucha emoción, después cena a la que se incorporaron Nuria y Lito y que se prolongó hasta la una y pico de la madrugada... además de comer bebimos un buen vino de Rueda regalo de la familia Casal y después champán francés que bajaba la mar de bien. La fiesta siguió el sábado con mariscada en El Mesón de Alberto, invitación del afortunado y luego por la noche celebramos mi santo en Los Bastones. Total que el fin de semana se resume en mucha fiesta y poco descanso, pero el verano está para lo que está. Luego en invierno ya descansaremos más la mente y los estómagos. De los regalos que recibí he de decir que tuve un poco de todo: pulsera, collar y pendientes a juego; bañador; zapatillas; traje de pantalón y chaqueta; una cazadora; un bolso; un pareo; un adorno para la casa.... y creo que no me olvido de nada. Lo que toca estos días es estrenarlo todo. Esta semana es posible que siga la fiesta en la costa de Lugo porque Juan (amigo de Beni y mío) también puede confirmar la misma y buena noticia que mi hermano, pero nos contendremos hasta poder decirlo al 100%. Las buenas personas siempre obtienen su merecido, unas veces tarda más y otras menos, pero siempre tienen su premio.